Referentes del sector de evaluación de riesgos y seguros afirman que la baja de los sucesos tiene que ver con el mayor control por parte de las autoridades, que han diseñado un sistema de auditorías que ha mejorado sustancialmente la seguridad de los despachos.
Las estaciones de servicio han sido estigmatizadas por explosiones famosas que quedaron en la memoria colectiva. Nuestro país no fue ajeno a este tipo de accidentes, basta recordar algunas, como la ocurrida el 2 de Noviembre de 1970 que destruyó un edificio de 3 pisos en la localidad de Hurlingam, a causa de la emanación de una estación de servicio vecina.
El 29 de diciembre de 1972, estalló un establecimiento ubicado en la esquina de las calles Charcas y Ecuador de Capital Federal, en la planta baja de un edificio de 5 pisos de altura, y más recientemente, en Febrero de 2003 una situación similar sucedió una boca ubicada en calle Araoz y Av. Santa Fe debido a una falla en un equipo durante la descarga de combustible desde un camión cisterna que provocó 8 heridos.
Sin embargo desde hace un tiempo ha disminuido notablemente la frecuencia de los eventos. Referentes del sector de evaluación de riesgos afirman la baja de los sucesos tiene que ver con el mayor control por parte de las autoridades, que han diseñado un sistema de auditorías que ha mejorado sustancialmente la seguridad de los despachos.
No obstante algunos accidentes prevalecen. Desde el Estudio Leza, Escriña & Asociados S.A., especialistas en seguros para estaciones de servicio destacan los impactos entre vehículos entre los principales, lo cual resulta ser razonable en función de ser un “vicio propio” de la actividad. También señalan la caída de carteles y marquesinas, provocada por vientos o acumulación de nieve y agua, que generan habitualmente daños a terceros.
Directivos de la consultora precisan que así como ha descendido la frecuencia de eventos de incendio en estaciones de servicio, se han incrementado los reclamos de Responsabilidad Civil. Puntualizan que en la cobertura “Comprensiva” es requisito analizar la inclusión de todos los adicionales pertinentes al riesgo y las responsabilidades contractuales derivadas de vehículos en custodia.
“Observando la oferta, evidentemente existen diferentes formas de aseguramiento del riesgo de Responsabilidad Civil y dependerá de la profesionalidad del asesor encontrar la cobertura óptima para las necesidades del asegurado y los requerimientos de la petrolera y las autoridades, como el caso particular del Enargas que exige contar a las GNC con una fianza que garantice de los requisitos solicitados para su habilitación, lo cual puede ser cumplimentado con un seguro de caución”, subrayaron finalmente los responsables del Estudio Leza, Escriña & Asociados S.A.