Asociaciones de consumidores resaltan que la merma en naftas y gasoil del 5 por ciento dispuesta por Nación en enero está siendo socavada por aumentos sostenidos que se vienen dando desde febrero hasta esta parte. Reclaman que el poder legislativo trate la sanción de una regulación de precios del combustible para que este no esté sujeto al libre juego de la oferta y la demanda.
Héctor Polino, titular de Consumidores Libres, entidad que tiene como objeto representar a los usuarios en su condición de compradores, en diálogo consurtidores.com.ar cuenta que debido al contexto internacional, tras la fuerte baja del barril de crudo en alrededor de un 60 por ciento, están reclamando una nueva rebaja en el precio de los combustibles en Argentina.
Es que en enero de este año el gobierno nacional declaró una caída en el precio de las naftas y gasoil de un 5 por ciento, sin embargo, a partir de febrero, se viene registrando un aumento sostenido del 1 mensual. “Hoy queda una rebaja del 2 por ciento”, calcula Polino y, ante esta lógica, no descarta que el mes que viene este ritmo progresivo continúe.
Además, el ex Diputado Nacional recuerda que “cuando aumentaba en los mercados tradicionales el valor del petróleo, subía automáticamente el precio de los combustibles en la Argentina”, y dice que en este caso “el valor del petróleo cae pero esa rebaja no se refleja en los surtidores del país”.
En ese contexto, Polino asegura que es necesaria “una Ley que regule el precio de los combustibles en nuestro país y que no esté sujeto al libre juego de la oferta y la demanda, porque esto termina beneficiando siempre a las empresas petroleras”, y para ello que Senadores y Diputados traten la Ley que permita regularlos.
Destaca que una sanción en este sentido es “central” en nuestro país porque el 90 por ciento del transporte de carga se hace a través de camiones. “La influencia del precio de los combustibles en la estructura general de costos de los artículos de la canasta básica de alimentos en promedio es de un 30 por ciento, y eso impacta luego en el precio de los artículos que el consumidor adquiere en la góndola de los supermercados”, argumenta.
No obstante, señala que no sólo falta de voluntad política por parte del bloque oficialista para debatir esta cuestión, sino también desde la oposición.
“Desde el punto de vista de los consumidores es importante que los candidatos digan qué piensan hacer en materia de política energética, precios de los combustibles y política petrolera”, concluye Polino.