Advierten que un “raro ambiente financiero” provocó una retracción en las intenciones de invertir en nuevas estaciones

ambiente financieroFuentes especializadas del sector alertaron sobre el “parate” que en estos últimos meses se dio entre los proyectos de inversión en nuevas expendedoras o embanderamientos debido a que entre otras cosas, “los que tienen capital prefieren invertirlo en dólares o en LEBAC”.

Si bien existe la seguridad de que muchas  empresas petroleras y grupos económicos  están demostrando su interés en incorporar nuevos negocios a sus redes actuales en aproximadamente 200 nuevos puntos estratégicos en todo el país, aseguran que las iniciativas privadas quedaron en “stand bay”.

Al ser consultados ciertos especialistas en negocios vinculados a las pymes estaciones de servicio ante las posibilidades de cambios en el panorama de la comercialización minorista de combustibles y GNC, las fuentes coincidieron en el hecho de que “de todos los proyectos de negocios para nuevos establecimientos que teníamos comprometidos en el segundo semestre del 2016, ninguno se concretó”.

Agregaron de de casi 30 carpetas que se esperaba que avancen en la última parte del año pasado, “todo quedó suspendido, ya que los que tienen capital prefieren invertirlo en LEBACS al 24 por ciento en lugar de arriesgarlo en una Estación de Servicio por un 8 de rentabilidad”.

Los expertos demostraron “verdadera preocupación” por el clima de negocios para el sector de expendio minorista y confesaron que “le aconsejan a sus clientes conservar los dólares que tengan ahorrados”.

Consideraron también que es difícil creer lo que digan las petroleras, porque muchas veces “los mismos referentes a los cuales consultamos durante muchos años, nos transmiten un horizonte sin muchas luces para el futuro y hasta ellos mismos están desorientados”.

Informaron que el año pasado había llegado a una suma de 200 lugares para licitar y ninguno de los proyectos se concretó finalmente y que a esto se sumó el blanqueo que “empeoró las cosas”.

Por último, dijeron que “la presión impositiva para la cadena de comercialización de combustibles es cada vez más pesada y los impuestos siempre caen sobre los mismos, lo cual impulsa a muchos a trabajar en negro”.

Fuente: SURTIDORES