La asunción de Axel Kicillof al Ministerio de Economía calienta la puja con Planificación por el incremento del corte obligatorio en las naftas y el gasoil. En la industria lo señalan como el líder de la resistencia a incrementar el uso de los Biocombustibles.
Después de varias semanas de convalecencia, la presidenta Cristina Kirchner retomó sus funciones y en su primera medida promovió a Axel Kicillof de viceministro a ministro de Economía. La asunción del funcionario, si bien no hizo más que transparentar el cargo que ejercía solapadamente, preocupa a la industria de los Biocombustibles, que señala al funcionario como el adalid de la resistencia a incrementar su participación en el mercado.
Desde hace un tiempo, la intención del Ministerio de Planificación y Secretaría de Energía es establecer el corte en el 10 por ciento, tanto para gasoil con biodiesel como para nafta con bioetanol a partir de enero próximo. La decisión sin embargo, choca de frente contra la negativa del mismísimo Kicillof, quien junto al “ex” secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, prefieren importar combustibles antes que promover la utilización de este recurso renovable.
Este esquema, premia con exenciones impositivas al gasoil traído del exterior y castiga con un 41 por ciento de impuestos internos – más Ingresos Brutos, IVA y otros gravámenes – a los productos de origen vegetal y local. En las actuales condiciones de comercialización, para los biocombustibles es imposible competir.
“Hay una disputa muy dura”, afirmó un referente del sector. “La situación de la industria de biodiesel, fundamentalmente de las grandes plantas, es muy complicada, en momentos que se achica significativamente la demanda externa”, precisó. Vale recordar que recientemente España y otros países de la UE decidieron excluir completamente a la Argentina de su mercado de biodiesel.
La fuente opinó que “si fuera por Planificación y Energía es cosa juzgada, pero todavía hay resistencia. No obstante, aunque sea demorada, los adversarios de los biocombustibles no podrán evitar esta medida”, apuntó. “Todavía no pierdo la esperanza que en enero o febrero se implemente”, vaticinó aunque sin demasiada convicción.
En este contexto habrá que ver que sucede con el pedido de ADEFA para que se revise la norma de calidad de las naftas, de modo que se adecue el contenido de oxígeno, a la luz de la incorporación de un 10 por ciento de bioetanol. El reclamo fue efectuado por el presidente de la entidad Cristiano Rattazzi y el Gobierno de Córdoba, provincia que congrega a numerosos productores del combustible vegetal, quienes coincidieron en que no existen inconvenientes en el proceso de fabricación de automóviles para elevar “ya mismo” del 7 al 10 por ciento la participación en las naftas súper y premium.