El Ingeniero Juan José Aranguren, se dirigió a este medio solicitando una aclaración a la nota publicada el día 21 de octubre en la que se cita a empresarios de las estaciones de servicio que denuncian escasez de productos por parte de esta bandera. Desarrolló su visión sobre la actividad, reconoció los inconvenientes de la red por el tope a los precios y aclaró las perspectivas de Shell en este contexto.
Mediante una nota enviada a surtidores.com.ar, el presidente de Shell Argentina, Ingeniero Juan José Aranguren, manifestó que “según datos de la Secretaría de Energía para el canal de estaciones de servicio, Shell ha abastecido en el período enero-septiembre de 2013 un total de 2.130 millones de litro a su red de comercios en todo el país. Este nivel de stock representa un crecimiento interanual de 4,92 por ciento, superior al crecimiento del mercado, que fue del 3,72”.
Párrafo siguiente, el experimentado directivo aseguró que “en Shell compartimos la preocupación de los expendedores respecto de los efectos sobre la rentabilidad de sus negocios que tiene la Resolución 35/13 y su extensión expresada por la Resolución 108/13, que consideramos arbitrarias e ilegítimas, prueba de ello es que las empresas subsidiarias de Shell que operan 49 estaciones de servicio (sobre un total de 632 en todo el país) se han presentado a la justicia para solicitar amparo ante dichas medidas, totalmente ilegitimas”.
“En este sentido es necesario señalar que los costos de Shell, tampoco han sido congelados, ni se les ha impuesto tope alguno, especialmente a nuestro principal insumo, el petróleo crudo, cuyo precio en dólares –moneda en la cual se comercializa en el mercado local – ha aumentado y, además, es afectado por la creciente devaluación de nuestra moneda. Este dicho insumo en la variedad tipo Cuenca Neuquina por ejemplo, el de mejor rendimiento para nuestra refinería y requerido por todos los competidores del mercado, aumentó en promedio un 24,7 por ciento hasta el mes de septiembre, y ya se han acordado nuevos precio para dicho petróleo crudo que, de mantenerse el actual ritmo devaluatorio (superior al 32 por ciento anual), llevarían el incremento durante el año 2013 al 40,9 por ciento”, explicó Aranguren.
Por último, agregó: “siendo también operadores minoristas, aunque de un número limitado de estaciones de servicio como mencionáramos más arriba, tenemos una fidedigna valoración de los márgenes con los que opera dicho sector de la cadena de valor de los combustibles líquidos. No obstante ello, como más del 90 por ciento del negocio minorista de Shell es explotado por expendedores independientes, su rentabilidad es para nosotros un factor clave en la toma de decisiones de nuestros precios mayoristas. Es por ello que periódicamente realizamos estudios para una mayor comprensión de la ecuación de rentabilidad de las estaciones de servicio de nuestra marca y consideramos que se encuadran en el cuartil superior de la industria que opera en reventa y muy por encima de los valores que se manejan para aquellos que operan en consignación”.
“Es lógico que si se pretende poner un tope (reitero, ilegítimo) al último eslabón de la cadena y los costos de materia prima se incrementan; los márgenes de comercialización, tanto mayoristas como minoristas (el del expendedor de combustibles) se verán deteriorados”, lamenta.
“No obstante ello, aún en esta situación, los márgenes de los expendedores de Shell se ubican en niveles sanos y sustentables; merced a una política comercial de la compañía – debidamente anticipada a sus expendedores al inicio de esta nueva reglamentación – que permitirá mantenerlos, sin desvíos, ni hacia abajo, ni hacia arriba, mientras duren las medidas ilegítimamente dictadas por la Secretaría de Comercio Interior”, concluye la carta.
