¿Cómo trabajar en la concientización? Los expertos en la materia hacen un análisis de los aspectos a tener en cuenta para evitar situaciones de emergencia frente a consumidores que cada vez respetan menos las normas de seguridad. ¿Es necesaria una actualización de la normativa?
Por el hecho de vender combustibles líquidos, las bocas de expendio siempre están en condiciones de sufrir un incendio. Hay innumerables casos y antecedentes en el mundo para traer colación. Por eso es que las autoridades vienen reforzando las medidas de prevención, actualizando la legislación y obligando a las estaciones a tomar cada vez más recaudos.
En base a su experiencia,Omar Sobrero, experto en seguridad e higiene especializado en el sector observa que “no son cumplidas en su totalidad”. Hace referencia a desatenciones tanto por parte de los expendedores como de los automovilistas.
“Accidentes menores siempre ocurren, como por ejemplo fuego en boca de tanque, al retirar el pico, pero si el operario de playa está capacitado para saber qué debe hacer, y entrenado para tener la destreza, es probable que no deje de ser más que una anécdota”, explica. Por eso pone el acento en la capacitación del personal.
Por parte de los usuarios, también nota actos inapropiados: “la normativa vigente tanto en líquidos como en GNC es adecuada, pero lo necesario es que sea respetada, y a diario vemos cargar motos con el cliente arriba, fumar dentro o debajo del vehículo y cerca del playero, cargar en bidones de agua mineral o en botellas, descarga de camiones cisternas sin el persona al lado del mismo, sin los elementos de seguridad reglamentarios en el lugar y a la distancia requerida”.
Así es que Sobrero llegó a la conclusión de que “en un 98 por ciento ocurren por incumplimientos a las normas vigentes”. En tanto, el experto propone trabajar en la fiscalización de los protocolos de seguridad, más que lanzar nuevas restricciones.
“El mayor riesgo se presenta en la descarga del camión cisterna, que implica tener 35.000 litros de combustibles sobre nivel de piso. Cualquier derrame o principio de incendio que no logre apagarse o controlarse de inmediato, originará un accidente grave, más aún si lo trasladamos a zonas céntricas o de alta concentración de personas”, advierte.