Según explicaron desde una entidad que defiende los derechos del consumidor durante los primeros días del año crecieron las quejas por tener que hacer largas colas para cargar combustible en las bocas de expendio de los principales centros turísticos del país. YPF y Shell fueron las marcas más afectadas
La llegada de miles de turistas a la costa atlántica desnudó dos problemas que sufre el mercado para garantizar el abastecimiento de naftas y gasoil cuando se produce un pico de consumo: escasez de estaciones de servicio y falencias de las petroleras en lo que respecta a la logística.
Héctor Polino, titular de Consumidores Libres, una organización que funciona en Buenos Aires y defiende los derechos de los usuarios indicó que “hemos recibido quejas de los automovilistas en cuanto a las colas que hay que hacer para cargar el combustible en las estaciones de la costa, sobre todo de nafta súper de YPF y combustible Premium de Shell”.
Sin embargo destaca que la comparación con el mismo período de 2012 arroja un cambio cualitativo. “La cantidad de reclamos se mantuvo en los mismos niveles pero antes era por faltantes de naftas y ahora es por tener que esperar mucho tiempo hasta llegar al surtidor”, diferenció.
Esto se explica por el gran crecimiento que tuvo el parque automotor, alcanzando records de ventas históricos, en paralelo con un proceso por el cual fueron cerrando miles de estaciones de servicio. En algunas localidades del interior del país los automovilistas tienen que viajar hasta alguna ciudad vecina para abastecerse.
Según cifras de la Confederación de Entidades del Comercio de Hidrocarburos y Afines de la República Argentina (CECHA) en enero de 2010 había 4.500 locales dedicados al negocio minorista de los combustibles, mientras que en septiembre de 2012 se registraron apenas 3.813, lo que representa un saldo negativo de 687 establecimientos.
La sangría de comercios continuó durante todo 2012 y según los referentes del sector no presenta mejores expectativas para este año. Es por esto que este año los dirigentes del sector centrarán su atención en conseguir una nueva ley de comercialización de los combustibles que defienda la subsistencia de los comercios independientes.
