Están preocupados y temen más ajustes. No están de acuerdo en la estrategia financiera de YPF, que pone el acento en conseguir liquidez con incrementos en los surtidores para destinar a los pozos de Vaca Muerta. Alertan sobre las consecuencias del costo de la canasta básica de alimentos.
En un país como el nuestro, donde la superficie territorial es la casi de un continente y el 90 por ciento del transporte de carga se realiza a través del camión, todo aumento en el costo del gasoil repercute inmediatamente en los productos que se venden en las góndolas”, explicaHéctor Polino, titular de Consumidores Libres asurtidores.com.ar.
En lo que respecta al rubro alimentos y bebidas, precisa que la incidencia en el valor final es del 35 por ciento. “Se encarecen directamente los artículos de primera necesidad”, advierte.
En tanto, pone el acento en YPF, petrolera estatal que en su opinión debería trabajar para que los usuarios tengan abastecimiento económico: “nosotros siempre estamos planteando este tema con los funcionarios del área y la respuesta es que YPF necesita financiamiento para avanzar con la explotación de recursos no convencionales”.
Polino contesta que “esos recursos tienen que provenir de reasignaciones de las partidas presupuestarias” ¿Por qué los automovilistas y el sector productivo deben cargar con los desaciertos en materia energética de los últimos años? Es la pregunta que se hace el reconocido dirigente del Partido Socialista.
Como consecuencia de esta política que se aplica desde la expropiación de las acciones del Grupo Repsol, en marzo de 2012, asegura que crecieron las quejas en la entidad que lidera. ¿Cuál es el reclamo? Tiene que ver con los valores que marcan las pizarras de las estaciones de servicio: el litro de nafta súper ya se acerca a los 15 pesos en algunas provincias. “Hay muchas denuncias”, sostiene.
Como si fuera poco, la alarma se enciende ante una posible devaluación del peso nacional: “va a repercutir negativamente en el bolsillo de los sectores sociales de menores ingresos y de la clase media. La prueba está que, en el mes de enero de 2014, cuando se produjo un ajuste del 20 por ciento, impactó muy fuerte en el proceso inflacionario”.
Paliativo de la coyuntura
Polino no comparte la posición del Gobierno Nacional, de no aplicar la baja del barril de crudo en el mercado internacional: “En Estados Unidos bajó el precio de la nafta en un 50 por ciento, a raíz de la caída del petróleo, y en Argentina la diferencia fue mínima, que ya se perdió con nuevos incrementos”.