Enviaron notas al Ministro de Producción y al Vicepresidente del Banco Central para que concreten un encuentro. Reclaman reducir el arancel y mejorar los plazos de acreditación. Caso contrario, desde el 1º de enero dejarán de recibir los plásticos para pagar la carga de combustibles.
Tal como adelantara surtidores.com.ar días atrás, a partir del primero de enero, de manera rotativa y escalonada, empezando los fines de semana, las Estaciones de Servicio independientes suspenderán el cobro de combustibles con tarjetas.
La medida tiene su origen en la falta de respuestas de las empresas y bancos al reclamo de disminuir el arancel que perciben por cada operación, así como reducir los plazos de acreditación, que actualmente está anclado en los 28 días.
Asimismo puntualizan que la utilización de este medio de pago conlleva la percepción de impuestos provinciales, que en la mayoría de los casos, sino en todos, representan saldos a favor del estacionero de imposible retorno.
No obstante, con la intención de hacer prevalecer el diálogo, los empresarios nucleados en la Confederación del Entidades del Comercio de la república Argentina (CECHA) enviaron notas al Ministro de Producción, Francisco Cabrera, y al Vicepresidente del Banco Central, Lucas Llach, para solicitarles su intervención en pos de favorecer una reunión que permita analizar las cuestiones planteadas.
Problemática local
En Argentina las tarjetas perciben prácticamente el doble de renta que en otros países de la región, además de que las empresas cobran un fe por el comodato de la terminal electrónica.
Se trata de un mercado concentrado por 10 bancos que se reparten el 80 por ciento del share. En este contexto, la Cámara Argentina de Comercio elaboró un informe en el que advierte que un establecimiento que quiera adherirse a un sistema de cobro electrónico está prácticamente “obligado a trabajar con Visa“. Es por su peso en la plaza, dado que el grueso de los usuarios cuenta con este plástico para realizar las compras financiadas.
Al presente, aproximadamente el 35 por ciento de los despachos se pagan a través de este mecanismo. El resto se divide principalmente en efectivo y cuentas corrientes de clientes importantes y habituales.
Fuente: Surtidores.