En su mayoría son operadores que incorporan surtidores de gas a locales que ya despachaban combustibles líquidos, principalmente asentados en regiones que presentan la infraestructura apropiada. Aseguran que la tendencia se mantendrá por las buenas perspectivas de precios que presenta el GNC.
De acuerdo a datos del sector se está ampliando la cantidad de bocas de expendio que ofrece Gas Natural Comprimido. Esto se debe a un doble proceso que se viene acentuando en el negocio de los combustibles: el gas está en la relación de costos más favorable desde su desarrollo en el país y los comercios que anteriormente se dedicaban exclusivamente a la venta de líquidos hoy requieren de un complemento para sostener económicamente la empresa.
No obstante esta tendencia, Luis Navas, asesor legal de la Asociación de Estaciones de Servicio (AES) indica que “si bien existen algunos emprendimientos nuevos en estaciones de carga de GNC están en su mínimo histórico”. A diferencia de épocas anteriores, sostiene que “las distribuidoras no otorgan factibilidades salvo que el emprendedor realice las obras necesarias”, exigencias que hacen inviable muchos de los proyectos.
Para poner en funcionamiento un nuevo local, Navas señala que “hay casos en que piden la construcción de varios kilómetros de gasoducto para poder acceder al servicio”, descargando el importante costo económico en el expendedor. Incluso cuenta que en algunas experiencias se solicitó caños de 12 y 30 pulgadas. “La realidad es que las distribuidoras, en general, no disponen de nuevo transporte en firme y en muchos casos ni siquiera de distribución”, lamenta. Asegura que Litoral Gas SA – jurisdicción en Santa Fe – es la que mayores deficiencias presenta.
Por eso, el dirigente aclara que los nuevos establecimientos “se instalan dónde pueden conseguir que la factibilidad no incluya obras de magnitud”, como por ejemplo ocurre con estaciones que ya funcionan vendiendo naftas y gasoil, ubicadas en el centro de las grandes ciudades o en cordones industriales.
Por otra parte, Navas destaca que a partir de la diferencia de costos con la nafta “nunca antes fue tan ventajoso para el consumidor circular a GNC”. No se anima a evaluar el futuro de la actividad en el largo plazo porque a su entender “la economía en general tiene graves distorsiones de precios relativos”, pero sin embargo espera con optimismo los próximos años, dado el crecimiento del parque automotor. Según datos del Ente Nacional Regulador del Gas (Enargas) durante los ocho primeros meses de este año el promedio mensual determinó 13.810 conversiones mensuales.
