El titular de Capega, Gonzalo Rodríguez, indicó que la situación de las estaciones de servicio en la provincia es similar a la que ocurre en el país, donde en el último año se cerraron aproximadamente unas dos mil.
En ese sentido, Rodríguez explicó que las cifras de las ganancias son demasiadas estrechas, y los costos por la inflación han aumentado bastante, lo que explica porque varios no han podido sostener el negocio y han decidido cerrar las puertas.
En cuánto a la polémica suscitada en el sur de la provincia por el precio del GNC y la diferencia entre distintas bocas de expendio, el empresario señaló que “los dueños son libres de cobrar lo que quieren porque el precio del GNC no está regulado ni controlado y ellos sabrás de los riesgos que tienen cuando aumentan los costos”, exclamó.
Sin embargo no coincidió con las declaraciones del empresario Jorge Rochia Ferro, quien había expresado que el año pasado en el balance anual las estaciones de servicio perdían plata. “No creo que sea tan así, por lo menos en nuestra experiencia no perdemos plata, pero sí el margen de ganancias es acotado, los márgenes de utilidades son muy finitos”, indicó.