Desafío 2013: lograr que las estaciones de servicio sean rentables

Así se comprometen los dirigentes que representan a los expendedores. Proponen al gobierno que impida a las petroleras disponer de puntos de venta propios y que fije la bonificación por la venta de combustibles en por lo menos un 15 por ciento, al igual que en otros países de la región, sin presionar por un precio al público mínimo o máximo

fotopre6176c

Manuel García, presidente de la Asociación de Estaciones de Servicio Independientes (AESI) fue claro y contundente a la hora de responder que metas se propone para este año: “vamos a trabajar para que la venta combustibles en nuestro país sea de una vez por todas rentable”.

Para ello, en primera instancia entiende que “las petroleras deben desprenderse de sus estaciones propias” – ya que por este canal se despacha el 52 por ciento de la demanda minorista global – para luego ponerlas en alquiler a operadores independientes interesados en explotar el negocio. “Hay que terminar con la competencia desleal que se genera cuando un proveedor pasa a competir con sus clientes”, reclamó.

Como segunda medida, propone a las autoridades nacionales, hoy presentes en los asuntos que hacen a la actividad, que establezcan una bonificación mínima del 15 por ciento para todas las estaciones de servicio, sin discriminación de marca. “El precio final tiene que pasar a ser una decisión del estado, no es un tema que nos afecte en gran medida”, admite, “pero el valor en surtidor debe contemplar un 15 por ciento para el operador”, subrayó García.

Actualmente, las bocas que son de YPF funcionan bajo el sistema de consignación y obtienen escasas regalías por comercializar productos que técnicamente le son ajenos. El resto tiene la posibilidad de manejar el margen de ganancia, pero se ven limitados por las condiciones de mercado que establece la petrolera estatal.

Haciendo uso de su gran participación sobre las ventas totales de combustibles, próxima al 58 por ciento, YPF es la que orienta y determina los precios de la competencia, lo que indirectamente afecta a las estaciones de servicio de otras marcas, que no pueden separarse por lejos de los valores de la compañía que gestiona Miguel Galuccio porque automáticamente bajan las ventas.

“Hay que sincerar el mercado. Hasta tanto esto no ocurra, va a continuar la concentración económica en manos de las petroleras y van a seguir cerrando estaciones de servicio”, alerta García. “Es inmoral lo que está ocurriendo”, disparó.

(Fuente: Surtidores)