Será el miércoles próximo en Capital Federal. Representantes de todas las provincias van a evaluar el curso de las negociaciones salariales y en base a las conclusiones analizarán medidas de fuerza. El congelamiento de los combustibles agudizó el conflicto con los empresarios. En Córdoba advirtieron que la medida no modifica sus pretensiones
El martes que viene a las dos de la tarde se reunirán los delegados gremiales que forman parte de la Federación de Obreros y Empleados de Estaciones de Servicio (FOESGRA) de Capital y Gran Buenos Aires para llevar una postura consensuada al congreso de Secretarios Generales que se programó para el día siguiente.
La intención de máxima es determinar los pasos a seguir en la discusión paritaria, atento que la Confederación de Entidades del Comercio de Hidrocarburos y Afines de la República Argentina (CECHA) manifestó su rechazo a llevar el haber mínimo de un playero a 6500 pesos.
El techo que Guillermo Moreno, el Secretario de Comercio, le puso al precio de los combustibles agravó la negociación con los dueños de las bocas de expendio porque los expendedores ahora tendrán más dificultades para absorber los incrementos de sueldo que pretende el personal.
En este marco, Andrés Doña, Secretario Gremial de FOESGRA advierte que “está la posibilidad cierta de entrar a un conflicto”. Sin vacilar, el dirigente apuntó que “en el congreso vamos a evaluar medidas de acción directa”, por lo que no se descarta decretar un paro de actividades.
Si bien reconoce que “el congelamiento de precios va a perjudicar a las pequeñas y medianas estaciones de servicio, porque nada le garantiza que durante estos seis meses no suban los costos operativos”, aclara que “de todas maneras los empleados necesitan recomponer el poder adquisitivo” frente a los niveles de inflación que se proyectan en la economía.
La Resolución 35/2013 fue una gran sorpresa para los trabajadores. “Para nosotros es una contradicción porque si YPF tiene la destilería dañada y por lo tanto va a tener que importar más naftas y gasoil, fijar los precios en todo el país no tiene sentido”, opinó.
En esta oportunidad una medida de fuerza apuntaría más al Gobierno Nacional que a las estaciones, teniendo en cuenta que dentro de los reclamos estaría incluido, con un rol central, el rechazo a la fijación de precios. Como positivo, los problemas de rentabilidad del sector volverían a ocupar el centro de la escena.
En Córdoba no modifican pretensiones
Ante la normativa publicada en el boletín oficial sobre el congelamiento de los precios de combustible líquido por 6 meses, el Sindicato Petroleros de Córdoba comunicó que mantendrá inalterable el pedido de aumento salarial, en línea con lo pactado a nivel nacional para la actividad.
“Si la medida de congelar precios sirve para frenar la inflación que tanto perjudica a los trabajadores, bienvenida sea. Pero no seremos los trabajadores petroleros de Córdoba los que modificaremos nuestras pretensiones. La discusión sobre esta normativa le es propia a la patronal con las empresas petroleras, no con los trabajadores”, puntualizaron.
“Bajo ningún punto de vista claudicaremos la paritaria para actualizar el salario, ni permitiremos que la cámara empresarial utilice ésta como excusa para alterar las negociaciones en el marco de la convención colectiva”, advirtieron.