En Río Negro y Neuquén sólo YPF y Axion Energy actualizaron los surtidores, mientras que Shell y Petrobras mantienen los mismos valores de principios de noviembre. En general, la tendencia del mercado refleja un alza mayor de los productos Premium, en gran medida importados y con mejor rentabilidad para las refinerías.
Un relevamiento realizado por la Cámara de Expendedores de Río Negro y Neuquén (Cecnern) muestra que todavía dos de las petroleras de mayor importancia no acompañaron los incrementos de los combustibles impulsados durante el fin de semana largo por la bandera estatal. Shell, de hecho, que en otras provincias imitó casi a la par las subas de YPF, en Rio Negro y Neuquén, todavía no hizo retoques a las pizarras, al igual que Petrobras.
De acuerdo a las estadísticas de la entidad, el 24 de noviembre YPF aplicó un sacudón del 7.71 por ciento a la nafta Premium ($9,37 el litro), del 7.47 al Euro Diésel ($8,63 el litro), del 7,42 al Diésel 500 ($7,67) y del 6.92 ($8,49) a la nafta súper. Axion Energy, por su parte, un día más tarde lo hizo en un 12,70 por ciento en el Euro Diésel, 13,67 en la nafta de mayor calidad, en un 10,80 en la Súper y apenas 3,23 en el gasoil grado 2.
Sin dudas, en la región patagónica fue YPF quién lideró la escalada en los surtidores en lo que va del año: 34 por ciento en la nafta Premium, 31,7 en la Súper, 28,3 en el Gasoil con menos de 500 ppm de azufre y 25 en el de mayor octanaje. Petrobrás, en tanto, fue la que aplicó menos ajustes: Pódium 21,47, Súper 23,69 y Diésel 14,79. De cerca la siguió Shell: V-Power Diésel 16,16, gasoil grado 2 15,16, Nafta Ultra 20,53 y Súper 16,52 por ciento.
En cuanto al abastecimiento, Carlos Pinto, Gerente General de Cecnern, señala que “está empezando a sentirse la escasez”, en principio por faltantes en las bocas de Shell, pero que luego arrastran al resto de las estaciones a sufrir problemas en el suministro, por el aluvión de consumidores que llegan en manada. Los camiones demoran más tiempo que la demanda, lo que genera en algunas ocasiones quiebres de stock.
Al no renovarse la resolución 108, aquella que ponía un techo a las naftas y gasoil en las regiones, quedaron sin efecto los valores máximos que hasta hace poco seguían de cerca los expendedores que operan en reventa. El mercado quedó liberado en la práctica, a la espera de que la nueva gestión despeje dudas respecto de los próximos meses. Por el momento, en el sector no esperan acomodamientos para lo que queda de 2013.