Expendedores independientes aseguran que hoy no pueden competir con las compañías petroleras debido a las dificultades monetarias que padecen para modernizar los locales. A los ojos de los consumidores los establecimientos nuevos y tecnológicos son más atractivos
En el mercado de los combustibles conviven empresas bajo distintas condiciones comerciales. El grueso de las bocas de expendio que hay en el país están administradas por operadores independientes que firman contratos con alguna petrolera para que los abastezca. Representan más del 90 por ciento del total de comercios registrados por la Secretaría de Energía.
Por otro lado, participan del mismo negocio los puestos que pertenecen directamente a los proveedores. Si bien en número no tienen trascendencia, en lo que respecta a ventas duplican a los gestionados por empresarios autónomos.
Según Ángel Luis Bigatti, presidente de la Asociación de Estaciones de Servicio de Formosa, la preferencia de los consumidores por estos establecimientos se debe a que están ubicados en zonas estratégicas – esquinas y rutas importantes – y cuentan con instalaciones de última generación, que los hace muy vistosos.
En estas condiciones de mercado, donde se permite la integración vertical, Bigatti asegura que “los operadores de bandera no podemos competir” y por eso insiste en mejorar los márgenes de ganancia. “Si bajan las ventas nuestro futuro está en duda o al menos es incierto”, advierte.
En Formosa, cuenta que los surtidores de las estaciones tienen más de cuarenta años de uso y prácticamente están obsoletos. Como contrapartida, explica que las petroleras continúan instalando estaciones propias muy modernas “pero no permiten que renovemos nuestros elementos de trabajo”.
Con vistas a solucionar este tema varios legisladores presentaron proyectos de Ley en los que proponen que las empresas productoras de petróleo, refinadoras o comercializadoras mayoristas de combustibles líquidos en todas sus formas no puedan gestionar o encarar la explotación por sí misma o por terceros de estaciones de venta de combustibles al consumidor. Sin embargo, hasta el momento no fueron discutidos en el parlamento.