El organismo regulador encomendó a las estaciones de servicio responder un cuestionario con directivas relacionadas a las actas de inspección y a las funciones que debe cumplir el representante técnico. Los expendedores aseguran que las medidas no aportan ningún beneficio y que además generan mayor carga administrativa.
En el afán de actualizar las normativas vigentes que cuentan con más de veinte años de antigüedad, el Ente Nacional Regulador de Gas dispuso una consulta previa con las estaciones de carga de GNC para que éstas efectúen sus observaciones.
La información solicitada refiere a las Actas de Inspección que los Representantes Técnicos (RT) deben realizar en las instalaciones con el objeto de optimizar los controles pertinentes. Allí se sugiere aportar sugerencias respecto a los datos que deben contener y el registro de firmas de los referentes de los establecimientos inspeccionados.
Entre algunas de las exigencias propuestas se dispone: relato de lo controlado, resultado del mismo, medidas correctivas, detalle de los cursos de capacitación, la incorporación de una leyenda en carácter de declaración jurada y finalmente presentar a la distribuidora, el formulario para que constate la validez de las firmas autorizadas.
Asimismo solicita a los expendedores que opinen acerca de la cantidad de bocas que representa el profesional , el tiempo de ejecución de los controles, el que demanda la gestión administrativa, además de poner a consideración si se debe limitar el número de estaciones a representar por el RT con el objeto de realizar las tareas normadas con mayor eficiencia. La iniciativa del Enargas dispone un máximo de 40 estaciones de caga para cada RT en un lapso mensual dentro de un radio de 300 kilómetros.
Al respecto, las estaciones de servicio están viralizando una nota para presentar en la que señalan “que no se justifican los cambios sugeridos”.
“Llama la atención el incremento de documentación y burocracia que se deberá realizar (certificación de firmas ante escribano y reiteración periódica de información, entre otras) generando más y más documentación desconociendo los fines perseguidos”, afirma el texto.
“Consideramos que las modificaciones sometidas a análisis no van a aportar ningún beneficio desde el punto de vista de la seguridad ni operativa de la estación de GNC, sino por el contrario, generan una mayor carga administrativa y de costos razón por la cual proponemos no implementarlas”, concluye el documento.
Fuente: SURTIDORES