En Rosario, trabajadores y empresarios decidieron no atender al público el jueves y viernes de la semana próxima, desde las 22 y hasta las 6 en protesta a los robos que se suceden a diario. En caso de no tener respuesta de las autoridades podrían extender la medida y hasta decidir trabajar por turnos. El martes hubo tres asaltos.
Empleados y expendedores de la ciudad de Rosario resolvieron no expender combustible el jueves y viernes de la semana próxima por la noche debido a la ola de robos que asola a las estaciones de servicio de esa localidad. La medida se tomó luego de que el martes a la madrugada fueran asaltados tres establecimientos.
La restricción en la venta fue decidida en conjunto entre el Sindicato de Estaciones de Servicio y la Cámara de Expendedores (CESGAR) y se efectivizará de 22 a 6 de la mañana, que es cuando se producen además la mayoría de los hechos delictivos.
Ismael Marcon, titular del gremio de trabajadores afirmó a este medio que la protesta es un primer paso. “Si no hay respuestas de las autoridades agregaremos un día más y sino atenderemos por turnos como las farmacias”, graficó. “Es un plan de lucha y no daremos marcha atrás hasta que se garantice la integridad de nuestros afiliados”, advirtió.
“Desde la última vez que abordamos el tema con la Subsecretaría de Seguridad, el 31 de julio, las cosas están igual o peor”, manifestó a su turno el presidente de la cámara, Marcelo Herrero al diario local. Para precisar la situación apeló a las estadísticas que lleva la entidad y que hablan de unos 20 robos al mes, y 40 desde el último encuentro que mantuvieron con las autoridades a fin de julio.
El disparador de esta decisión fue el robo que padecieron el martes por la noche tres estaciones de servicio de las zonas oeste y norte. El primero de ellos fue apenas comenzaba la oscuridad, el segundo fue alrededor de las 2.30 en el comercio ubicado en bulevar Rondeau y Marull, en la zona norte, mientras que el restante fue casi una hora después en la zona norte.
Por el primer caso fue detenido un hombre, de unos 28 años, que llevaba un cuchillo entre sus ropas, mientras que en los otros dos, que fueron en la misma zona, participaron cuatro hombres que se movilizaban en dos motocicletas.
