Los estacioneros que comercializan combustibles sin una marca que los represente desecharon la posibilidad de otorgar un aumento de sueldo coincidente con el reclamo de otros gremios. “Un 23 por ciento sería una cifra coherente”, afirmaron.
A poco de comenzar las negociaciones paritarias, los gremios ya fijaron un piso de aumento salarial coincidente con el incremento del costo de vida. Docentes, trabajadores de la salud y gastronómicos, entre otros, reclaman un ajuste de esas características fundados en la pérdida del poder adquisitivo.
Los trabajadores de estaciones de servicio aun no oficializaron la cifra aunque fuentes extraoficiales afirmaron que rondará el 45 por ciento. Todo se definirá próximamente en un encuentro nacional que definirá el número final que llevarán a la negociación paritaria.
Sin poner en tela de juicio la justeza del pedido, los expendedores independientes aseguran que el número es “inviable” para el sector. Manuel García, titular de AESI, señala “que habrá que acordar un número razonable a la rentabilidad que tenemos”.
“Un 23 por ciento sería una cifra coherente”, estimó. “Otra sería imposible de afrontar en este momento cuando los precios bajaron y las ventas también”, explicó el empresario. “Hay que preservar las fuentes de trabajo”, remarcó.
García destacó que el contexto de la discusión salarial es desfavorable para los estacioneros. “No hay que descartar nuevas rebajas de precios”, precisó. “Este mini aumento decidido por las petroleras fue inoportuno y no sirve para sanear la economía de la actividad”.
Si bien aun resta más de un mes para dirimir la paritaria, empleados y expendedores comenzaron a delinear cual será la postura que llevarán al Ministerio de Trabajo. Por ahora las posiciones no encuentran coincidencia pero se espera que con el correr de los días el consenso vaya ganando espacio.