Desde que el Gobierno aplicó un congelamiento a los precios de los combustibles, las estaciones sufrieron aumentos en los costos de hasta un 10 por ciento, a pesar de que todavía no fueron determinadas las referencias regionales
Rosario Sica, presidente de la Federación de Empresarios de Combustibles de la República Argentina (FECRA) se mostró preocupada por el porvenir de las estaciones de servicio. Apuntó que apenas se publicó la Resolución 35 “las empresas Shell, YPF y Esso, aumentaron las naftas en un 10 por ciento” a pesar que “desde el punto de vista oficial no pasaron los topes” para cada región.
En estas condiciones, teme por la rentabilidad del grueso de los operadores, sobre todo ahora que entrarían a regir los incrementos de sueldo. El costo laboral representa el 80 por ciento de los egresos de una boca de expendio, de ahí la importancia del porcentaje que se cierre a nivel nacional.
Teniendo en cuenta las últimas medidas que se tomaron para el sector – congelamiento de los combustibles – y por la evolución del mercado en general, Sica opina que las expectativas de las estaciones no son buenas. “La actividad está muy golpeada”, lamentó.
El mismo panorama atraviesan los empresarios de todo el país, aunque con algunas aristas distintas. En las provincias donde opera, Refinor aplicó ayer un nuevo incremento de costos, que según estimaciones de Sica sería del 4 por ciento. Esto afecta directamente a los expendedores porque les limita la bonificación de cara al futuro, para cuando estén nivelados sobre el tope.
Con la división entre regiones que determinó la Resolución 35, Capital y Gran Buenos Aires, quedaron juntas bajo el mismo techo, lo que posibilita a una buena parte de los locales a remarcar las naftas hasta en un 15 por ciento, como ocurre con YPF. El importe más alto está determinado por las bocas sin bandera, que por lo general tienen los precios más altos. Por lo tanto, un local del interior de la provincia que despachaba bajo volumen pero a un valor más caro, será la referencia general.
Sica explica que en la región seis “hasta Shell tiene un margen de un 11 por ciento aproximadamente para ajustar sus productos”.
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