La modificación de ganancias preocupa a los empleados de estaciones de servicio

fotopre10359La decisión de Mauricio Macri de subir el mínimo no imponible del impuesto a las Ganancias no cayó demasiado bien en el sector de las bocas de expendio. Aseguran que es un aumento encubierto para los sindicatos más poderosos con el objetivo de que fijen un techo a las negociaciones paritarias.

En un acto que tan solo duró 15 minutos, el presidente Mauricio Macri anunció modificaciones en el impuesto a las Ganancias, un antiguo reclamo de los gremios, en momento en que se discuten las paritarias. El mínimo no imponible tal como había anticipado el Gobierno se elevó a 30 mil pesos brutos.

“El anterior gobierno se administró mal y nunca ajustó el mínimo no imponible. Por eso hoy siento que estamos dando un primer paso. Anunciamos el aumento del mínimo no imponible a 30.000 pesos. Es un aumento del 160 por ciento, retroactivo al 1 de enero“.

La ceremonia contó con la asistencia de integrantes del gabinete nacional y dirigentes sindicales, entre los que se encontraba Hugo Moyano, Luis Barrionuevo y el titular del gremio de estaciones de servicio, Carlos Acuña.

Si bien la noticia fue muy bien recibida por la mayoría de los gremios, el Secretario General del Sindicato Petroleros de Córdoba, Guillermo Borelli, tomó la novedad con un alto grado de preocupación.

“Nuestros trabajadores no están alcanzados por el impuesto”, señaló. “Los que podrán disfrutar de este aumento encubierto son los afiliados al gremio de Moyano; es evidente que está pensado para que sean ellos mismos los que negocien un techo para los salarios muy por debajo de la inflación arrastrando al resto de las actividades”, lamentó.

“Es una estrategia del gobierno para aquietar los reclamos”, expresó Borelli, al tiempo que insistió que a los empleados de las estaciones de servicio “no los afecta en lo más mínimo”.

“A nosotros nos preocupa la negociación salarial, perdimos el 40 por ciento del poder adquisitivo en solo dos meses y recuperarlo va a ser muy difícil”, pronosticó. “Hay discursos catastróficos que amenazan con la estabilidad laboral; por ahora está todo tranquilo pero si cae el consumo vamos a estar en problemas”, diagnosticó.

En ese sentido volvió a reclamar aumentos cada seis meses. “Es la única manera de preservar el bolsillo ante el avance de los precios”, concluyó.

Fuente: SURTIDORES