Un relevamiento privado sintetizó como fue el mercado de las estaciones de servicio durante el año pasado. Se registraron más cierres que aperturas pero en algunas regiones, especialmente en sur del país, el negocio se expandió.
Argentina cuenta con 4429 estaciones de servicio abiertas y en funcionamiento. La cifra, de acuerdo a un relevamiento efectuado por la Confederación del Comercio de los Hidrocarburos (CECHA), arroja un saldo negativo a nivel país de 22 bocas respecto al año anterior aunque el escenario no fue uniforme para todas las provincias.
Es que de acuerdo a este análisis la situación del mercado varió considerablemente según la región. Por ejemplo, Buenos Aires inauguró 26 nuevos comercios en 2013 mientras que Santa Fe perdió 22 y Córdoba, 8.
Teniendo en cuenta la cantidad de puntos de venta, el número de establecimientos estrenados en el principal distrito del país es irrelevante si se lo compara con Neuquén ya que los nuevos surtidores representan el 1.61 por ciento del parque de estaciones de servicio de esa provincia en tanto que los 3 de la comarca patagónica constituyen el 4.48.
Capital Federal es otra de las que se instala en la columna del haber: se benefició con 6 flamantes bocas mientras que en Santiago del Estero se abrieron 3, en La Pampa y Corrientes, 2 y en Formosa y Tucumán 1 cada una.
En el otro extremo se ubican Mendoza con 9 cierres, Entre Ríos y San Luis con 6 – la cifra representa el 10 por ciento de los comercios existentes-, Río Negro y Chubut con 5, Misiones y Jujuy con 2, La Rioja, 1 y el resto sin variaciones.
Buenos Aires es la provincia con mayor densidad de estaciones de servicio, 1638; Córdoba le sigue con 498; Santa Fe, 486 y CABA, 258. Entre el resto de las más pobladas de surtidores se sitúa Mendoza con 215; Entre Ríos, 186 y Tucumán, 112.