La mayoría de las petroleras ya posicionaron los valores de las naftas y el gasoil cerca del límite establecido por la Resolución 35/2013, esto es, los más altos de cada región al 9 de abril. De este modo alcanzaron los máximos mucho antes de que se venza el congelamiento de seis meses dispuesto por la medida
Pasaron tan sólo tres meses desde que comenzó a regir la Resolución 35/2013 y los valores de los combustibles ya se ubican en el máximo previsto por la normativa. Como se recuerda, la ordenanza que lleva la firma del Secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, determinó que –por el término de seis meses- el precio tope de comercialización de los hidrocarburos líquidos a aplicar por todos los expendedores, será el que resulte igual al más elevado del día 9 de abril del corriente año.
De este modo, la mayoría de las estaciones de servicio del país alcanzaron el límite tres meses antes de su vencimiento efectivo. Si bien no hay referencias claras de cual es ese techo –la norma ordenó a las empresas petroleras informar para conocimiento de sus clientes el precio más alto en cada región- las comunicaciones que envían asiduamente a sus bocas abanderadas dan cuenta de que no queda margen para seguir aumentando.
Antes de la Resolución 35 los combustibles subían mediante pequeños retoques mensuales que acumulaban el 25 por ciento en el año. Según un relevamiento de la Secretaría de Energía, en este breve período las pizarras treparon hasta un 20 por ciento, que sumado a los incrementos aplicados desde el comienzo de 2013 ya superan esa cifra.
Desde esta óptica, se puede suponer que al recaudar más por lo que despachan, los estacioneros se benefician con al suba. Sin embargo y tal como lo reflejan sus protagonistas, nada más distante de ese escenario: «Estamos preocupados, porque en este juego de establecer precios máximos, a nosotros no nos toca un peso. Es en una situación muy crítica y estamos estudiando junto con los trabajadores tomar algún tipo de medidas, porque las estaciones de servicio siguen cerrando por falta de rentabilidad», describió Manuel García, presidente de AESI.
La presidenta de la Federación de Empresarios de Combustibles de la República Argentina (FECRA), Rosario Sica, señaló en tanto que este escenario es viable “mientras nos congelen todos los costos. El salario, por ejemplo, es el 60 por ciento para una estación de servicio en los costos de explotación», explicó. Recientemente las cámaras empresarias acordaron con los trabajadores del sector un incremento salarial que rondó el 27 por ciento.