Más ventas, menos estaciones: una ecuación favorable para las sobrevivientes

fotopre8470Las bocas de expendio que lograron campear la crisis que atravesó el sector en los últimos dos años mejoraron los índices de despacho en términos absolutos. Los negocios de mayor envergadura fueron los más beneficiados.

Hace dos años atrás el mercado de las estaciones de servicio se repartía en 4.555 negocios según estadísticas elaboradas por las entidades del sector. Actualmente y a pesar del crecimiento de la demanda de combustibles, el número se redujo 4.434.

Es que las condiciones del mercado fueron determinantes para decidir la continuidad o no de los 121 establecimientos que debieron colgar las mangueras. Vale recordar tan sólo la decisión del entonces Secretario de Comercio Interior Guillermo Moreno, que estableció un precio tope para las naftas y el gasoil durante casi todo 2013, devastando la rentabilidad de los expendedores, que padecían aumentos de los costos mientras las pizarras permanecían congeladas.

De acuerdo a datos de la Secretaría de Energía, en abril de ese año, las ventas de combustibles al público totalizaron 1.327 millones de litros, correspondiéndole a cada boca de expendio 291 mil en términos absolutos. Al presente ese valor ascendió a 317 mil mensuales, debido a la expansión del consumo y a la menor cantidad de surtidores.

La ecuación sin embargo, no benefició a todas por igual. Así lo confirma un relevamiento efectuado por la AFIP, que señala que el 39,4 por ciento de las empresas son microempresas, 43,1 son pequeñas, el 17,1 son medianas y el 0,4 son grandes. Claro que estas últimas, venden el 13,1 por ciento del total del sector e ingresan el 13,5 del impuesto a las Ganancias, mientras que las microempresas efectúan ventas por el 3,4  por ciento del total.

Según estudios realizados por las cámaras empresarias un establecimiento que opera en el sistema de compra venta requiere un mínimo de 350 mil litros para alcanzar el punto de equilibrio, mientras que una consignada 500 mil. Este sin dudas, es el argumento que explica porque siguen cerrando estaciones de servicio a pesar de que la demanda sigue en alza.

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El análisis afirma que las bocas pertenecientes a YPF promedian un caudal de ventas de 528 mil litros por mes, las de Refinor, 417 mil; Shell, 396 mil y AXION 354 mil. Las estaciones pertenecientes a la petrolera estatal fueron las que más amplificaron su actividad, escalando  los despachos 13.5 por ciento en los últimos dos años.

(Fuente: SURTIDORES)