A pesar de que el dólar blue superó los 14 pesos, los automovilistas de Brasil y Paraguay no se abalanzaron sobre las estaciones de servicio locales, como ocurría en otras oportunidades. ¿Cuáles son los motivos? Estado de situación del mercado en Misiones y Formosa.
El dólar paralelo, aquel que se cotiza en la banda informal, descendió el viernes por tercer día consecutivo, esta vez en 15 centavos, ubicando el billete a 14,49 pesos. En el mercado marginal, mientras tanto, el oficial se negoció en alza, a 9,18. Es el que “se consigue” en bancos y casas de cambio de la city porteña.
Frente a estos desajustes del tipo de cambio, en las localidades linderas con Paraguay y Brasil suelen llegar automovilistas en manada para llenar el tanque y aprovechar la diferencia de precio.
Sin embargo, Faruk Jalaf, presidente de la Cámara de Estaciones de Servicios del Nordeste (Cesane) asegura que ahora “no está pasando”. Encuentra dos motivos: el costo del combustible argentino se valorizó a un ritmo de entre 40 y 50 por ciento durante tres años, nivelándose con las estaciones fronterizas. Y además, por el importe al público del litro de nafta súper, prácticamente equivale a un dólar.
A esto se agrega la devaluación de la moneda que aplicaron estas naciones, lo que encareció también el acceso a la moneda extranjera por parte de los usuarios, sobre todo en Brasil, que está próximo a Misiones. “No hay consumidores de afuera como en otras épocas; se ven algunos pero por las vacaciones de invierno”, explicó el dirigente.
La llegada de vehículos foráneos compensaba los inconvenientes de rentabilidad que padecen las bocas de expendio. En estas condiciones los expendedores minoristas se quedaron sin una fuente de ingresos, que complica aún más el panorama, en un contexto de caída del consumo. “Se siente mucho en gasoil”, indica Jalaf ante la consulta de surtidores.com.ar. El año pasado mermó la demanda en un 20 por ciento.
Medida compensatoria
Jalaf insistió en incluir a las provincias del NEA en la propuesta que elaboró Guillermo Pereyra, senador del MPN, que obtuvo media sanción en la cámara alta y sugiere modificar el inciso D del Artículo 7° de la Ley 23.966, de 1991, relativo a la aplicación del Impuesto a la Transferencia de los Combustibles (ITC), para abaratar los costos un 22 por ciento en las naftas y 12 por ciento en gasoil, sólo en los surtidores de Río Negro y Neuquén.
Agregando esta modificación, Jalaf explica que se reactivaría el consumo y la actividad económica en general. Principalmente teniendo en cuenta que en esta región no hay oferta de GNC y las pizarras de las estaciones marcan los números más altos del país.