Por el aumento de los costos operativos, las estaciones blancas piden medidas económicas urgentes

Reclaman a YPF que profundice y extienda a todo el país un proyecto que se anunció para la provincia de Mendoza que plantea embanderar a todos los comercios sin bandera de la zona. Advierten que con los nuevos aumentos de sueldo el punto de equilibrio se ubica en el doble del promedio mensual

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Prácticamente todas las provincias están cerrando los convenios colectivos de trabajo. Por lo general, los acuerdos en el interior siguen los parámetros que firmó la Confederación de Entidades del Comercio de Hidrocarburos y Afines de la República Argentina (CECHA) con la Federación de Obreros y Empleados de Estaciones de Servicio (FOESGRA), que establece una suba del sueldo básico para todas las categorías del 24 por ciento – 17 en abril y 7 en agosto-, más 800 pesos no remunerativos.

Manuel García, presidente de la Asociación de Estaciones de Servicio Independientes (AESI) asegura que con este nuevo egreso que se suma “las estaciones blancas y embanderadas tienen ahora que despachar como mínimo 300.000 litros para llegar a fin de mes sin perder ni ganar dinero. Las de YPF, compara, tienen que vender 400.000 litros, porque manejan un margen de ganancia más bajo, administrado por la misma petrolera.

“Nosotros vendemos en promedio 150.000 litros, la mitad de lo que necesitamos”, advierte. Explica que “si estamos subsistiendo es gracias a la economía de guerra que practicamos los operadores”, lo que implica transformar el negocio en familiar, para evitar la contratación de empleados. Cada trabajador representa 12.000 pesos mensuales para los establecimientos, sumando cargas sociales y patronales.

Como solución, García propone retomar una iniciativa que se pensó en un primer momento para Mendoza, donde YPF tiene una presencia muy importante en el mercado, superior al resto del país, que plantea abanderar por etapas a los comercios independientes. De esta manera, se busca garantizar el abastecimiento de combustibles a la comunidad y salvar a los locales más chicos, hoy expuestos a retirarse del negocio.

Si el proyecto no se llega a plasmar tal como está previsto, el dirigente pide por lo menos que el proveedor más importante y de propiedad estatal se ocupe de asegurar el suministro de naftas y gasoil a este segmento. “Tenemos que transparentar el mercado y evitar la intermediación, sacando a los distribuidores del medio, para mejorar la rentabilidad y tener un precio acorde con la competencia”, plantea el dirigente.

(Fuente: Surtidores)