Fue la conclusión de la audiencia realizada en la delegación del Ministerio de Trabajo de Tres de Febrero. Durante la reunión, la empresa debió comprometerse a no volver a utilizar los disfraces de colegialas que hicieron ganar notoriedad a las empleadas. Aun deben definirse las denuncias realizadas ante el INADI.
Finalmente y tal como estaba pactado, las autoridades de la delegación regional Tres de Febrero del Ministerio de Trabajo, recibieron al Sindicato de Estaciones de Servicio para dirimir la denuncia realizada por la agrupación contra una estación de servicio de GNC que obligaba a las playeras a vestirse como “colegialas”.
El caso tomo gran notoriedad después de una nota periodística. A pesar de las opiniones encontradas, algunas a favor y otras en contra, en el afán de evitar polémicas, la empresa decidió cambiar el uniforme por otro –también sugestivo- de calzas rojas similar al que utilizan las promotoras de las carreras de autos.
Durante la audiencia, de la que participaron representantes de la estación de GNC de avenida Gaona e Yrigoyen y del sindicato de empleados de estaciones de servicio, los empresarios debieron comprometerse a no volver a utilizar los disfraces de colegialas que le hicieron ganar notoriedad a la boca de expendio.
Además, de acuerdo con lo informado por el sindicato, hubo un reclamo por descuentos de dinero que les hacían a las chicas. “Les descontaban de sus sueldos en caso de que hubiera faltante de mercadería o de caja. Teníamos que tratar de llegar a un acuerdo con la empresa en los dos aspectos. Quedamos en que no se les volverá a otorgar ese tipo de uniformes. Y, en estos días, esperamos que le devuelvan lo descontado“, aseguró un representante del gremio.
Lo que aun resta definir es la denuncia realizada por la concejal Cristina Herrera (FPV), por violencia doméstica y de género. La edila planteó que la iniciativa por parte de la estación de GNC “degrada a la mujer ya que son vestimentas que se asocian directamente con las fantasías sexuales“.
“El uso de indumentaria con el fin de exhibir el cuerpo de las mujeres o alguna de sus partes como estrategia de promoción y/o venta vulnera la Ley N° 26.485 de Protección para prevenir, sancionar y erradicar la violencia contra las mujeres en los ámbitos en que desarrollen sus relaciones interpersonales“, detalló al respecto Perla Prigoshin, coordinadora nacional de la Comisión Nacional Coordinadora de Acciones para la Elaboración de Sanciones de Violencia de Género (Consavig).
Y agregó: “No se trata de una postura moralista sino ideológica en tanto apunta a desnaturalizar los patrones que las subordinan al orden masculino como, por ejemplo, aquel que legitima que a los varones adultos les gusten las colegialas“.