Tras la última suba del lunes en los precios de los combustibles el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, afirmó que ya no habrá más incrementos hasta finales de 2014. Evitó hablar de intervenciones y puso la decisión en la cabeza de los empresarios.
En su habitual conferencia de prensa que brinda cada mañana en la Casa Rosada, el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich afirmó que “la tendencia será mantener el precio de los combustibles durante el transcurso de este año”.
Sin embargo, y para desligarse de la sanción de un nuevo marco regulatorio como el dispuesto por el entonces secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, que congeló los valores en el surtidor durante buena parte de 2012 y 2013, explicó que “quienes tomaran la decisión son las propias petroleras”.
“Hemos observado que voceros de algunas empresas han determinado que no existirán más incrementos de precios de los combustibles durante el corriente año, y esta es una cuestión que deciden las empresas desde su posición en el mercado“, remarcó.
Los dichos de Capitanich fueron puestos en duda por especialistas del sector, quienes sostienen que Argentina importará este año unos 13.500 millones de dólares en energía, por lo que los precios internos de los combustibles seguirán atados a los valores que registre el crudo en el escenario internacional.
“Los ajustes van a ser pequeños de aquí a fin de año“, estimó Luis Malchiodi, presidente de la Unión de Expendedores de Naftas bonaerense, en diálogo con los medios de comunicación.
“La inflación no cesa. Al contrario, creemos que se está acrecentando y esto genera que tengamos que hacer ajustes en los combustibles líquidos“, justificó el empresario.
También tendrá sus efectos el manejo que el Banco Central realice sobre el tipo de cambio, dado que de existir una abrupta devaluación de la moneda como la de enero pasado, el precio del petróleo se encarecerá en pesos y eso se trasladará a los surtidores.
