Expertos en energía entienden que durante este año será necesario importar grandes cantidades de gasoil, no tanto de naftas, por considerar que el consumo seguirá creciendo y que las obras de ampliación en las refinerías que proyectan las petroleras demoraran un tiempo hasta brindar resultados positivos. El panorama podría cambiar recién en 2014
Durante todo 2012 casi que no hubo faltantes de combustibles en las estaciones de servicio. Salvo por momentos, y en algunas zonas puntuales, donde escasearon productos como la nafta súper o el Euro Diesel, en general, el mercado tuvo un año sin demasiados sobresaltos.
Teniendo en cuenta que en 2011 las colas en las bocas de expendio eran interminables, muchos referentes del sector se preguntan por las causas que llevaron al cambio de tal situación.
Por lo general, admiten que hubo mejoras en la producción de combustibles, sobre todo en YPF, que logró aumentar los refinados en un 7 por ciento en relación al plan de la gestión del Grupo Repsol, generando 681.000 metros cúbicos más de naftas y gas oil.
Ya en el tercer trimestre del año YPF llevó la utilización de sus refinerías del 83 al 96 por ciento, medida que se reflejó en una mejora sustancial en el abastecimiento a las estaciones de servicio. También influyó la disminución de la calidad de la nafta súper al bajarla de 96 a 93 octanos para obtener más volumen.
Sin embargo, los empresarios del rubro suponen que la normalización del abastecimiento se produjo en parte como consecuencia de la caída de la demanda de gasoil. De acuerdo a datos de la Secretaría de Energía a lo largo del 2012 bajaron las ventas entre un 5 y 8 por ciento según el mes que se tome como referencia. En algunas provincias la merma afectó a las estaciones de servicio en mayor medida por la magra cosecha del agro.
De cara al próximo año, Eduardo Barreiro, licenciado en Química, consultor en temas de Energía y director de la Society of Petroleum Engineers, regional argentina, analiza que “vamos a tener que importar algo de nafta y bastante de gasoil”.
Reconoce como positivo que YPF proyecte mejorar la producción de combustibles en un 37 por ciento durante los próximos cinco años, pero advierte que estos resultados llegarán concretamente al mercado con esfuerzo hacia fines de este año o a lo largo del 2014, aunque tampoco hay certezas.
Axion Energy también anunció que desarrollará un proyecto de ampliación de la Refinería de Campana que le permitirá aumentar su capacidad de producción de diesel en un 60 por ciento y la de naftas en un 50 pero también en el mediano plazo.