Siete años atrás la ley de promoción se presentó como rueda de auxilio del abastecimiento de combustibles. Las empresas se refugian en la venta de aceite de soja a China, India, el norte de África y Medio Oriente, mientras esperan que el Gobierno Nacional incremente el corte obligatorio en el mercado interno. Aseguran que la resistencia al biocombustible en la plaza local parte desde YPF.
El conflicto comercial que nuestro país enfrenta con la Unión Europea (UE) por las trabas que impuso ese bloque al ingreso de biodiesel desplomó las exportaciones y también la producción. Las ventas externas, que totalizaron u$s 602,9 millones en los primeros ocho meses de este año, se derrumbaron 58,4 por ciento en comparación con igual período de 2012, según un informe difundido por la consultora Investigaciones Económicas Sectoriales (IES).
En este contexto las empresas más afectadas son aquellas que elaboran más de 100.000 toneladas por año y no producen el aceite de soja. Las grandes, en cambio, abocaron el negocio a la colocación de aceite crudo a los países que todavía lo demandan, como China e India, mientras que las pequeñas, siguen enfocadas en abastecer el mercado interno para uso automotor. Como positivo, fuentes del sector aseguran que hay posibilidades –mínimas – de enviar más volumen a Estados Unidos.
Por eso es que en la actualidad hay plantas de algunas firmas importantes que están sin funcionar: Unitec Bio, Renova, Molinos y Explora, entre otras. Todavía no han desafectado al personal pero es de suponer que si extiende este panorama en algún momento pueden anunciar despidos. Este tema está siendo analizado por el Sindicato de Trabajadores del Petróleo, del gas y de los Combustibles de Origen Vegetal de Empresas Privadas de San Lorenzo, Rosario y Departamentos de la Zona Sur de Santa Fe.
Fuentes del rubro aseguran que “por el momento el Gobierno Nacional no está interesado en aumentar la participación del biocombustible”, tal como exigen desde las cámaras empresarias para compensar los envíos al exterior. “YPF no está a favor de incrementar la participación del Biodiesel”; apuntan. Incluso a pesar de que el gasoil importado es más caro que el producto de origen nacional.
En la actualidad hay 27 firmas que participan del convenio de abastecimiento para el mercado interno y la mayoría se ubican en Santa Fe, cercanas a Rosario, donde se concentra uno de los polos sojeros más importantes del mundo. También hay fábricas instaladas en otras provincias: La Pampa, Buenos Aires, Córdoba, Entre Ríos, Santiago del Estero, algunas de ellas en riesgo de cerrar.
