Se negaba a despachar combustibles argumentando que no había: despido por pérdida de confianza

fotopre8528El empleado de una estación de servicio de bandera Shell fue despedido al comprobársele que se negaba atender a los clientes diciéndoles que el establecimiento carecía de combustibles aunque si había. Lo hacía desde el interior del shop donde se instalaba a pasar la noche. La justicia desoyó su reclamo.

La escasez de combustibles que padeció el país hace algunos años aun sigue trayendo consecuencias. Y vuelve a ser Shell la implicada, no esta vez en el ámbito de la ley de abastecimiento, pero si en las derivaciones que provocó esta circunstancia en sus estaciones de servicio. Al igual que en otras causas similares relacionadas a este tema,debió resolver la Justicia, que en sintonía con fallos anteriores, rechazó la responsabilidad de la petrolera.

El caso se originó en el despido de un empleado de una boca de expendio operada por la subsidiaria de la compañía, Deheza SA. Ocurrió cuando se comprobó que el actor se retiraba de los surtidores donde prestaba tareas como playero, ingresaba al minimercado ubicado dentro del predio de la demandada y que desde allí les hacía señas a los clientes que se acercaban indicándoles que no había combustible, siendo que en realidad disponía de existencia.

Lo concreto es que si bien la empresa registraba faltante de un producto, poseía otro de características similares. “El actor sin ninguna razón o justificativo, abandonó su  lugar de tareas que era la playa y negó el expendio de gas oil a los clientes haciéndoles señas desde el interior del minimercado e indicándoles que no había combustible. Los hechos quedaron registrados en la cámara de seguridad instalada en la estación de servicio que captó la inconducta del actor”, precisaron los jueces de la Sala 2 de la Cámara del Trabajo.

“Resulta relevante que el dependiente no probara en las actuaciones la razón invocada para abandonar el puesto de trabajo, es decir que no hubiera ningún tipo de combustible para despachar, correspondiendo aclarar que la demandada sólo reconoció la falta de naftas pero no que no hubiera otros combustibles para vender o que existiera alguna razón para no ofrecer los demás servicios de playa que se brindan a los clientes tales como aceites, refrigerantes o atención personal en la limpieza de vidrios o medida de fluidos de los vehículos”, agregaron los  magistrados.

Tras estos argumentos, los Dres. Miguel Ángel Pirolo y Miguel Ángel Maza, justificaron la “pérdida de confianza” invocada en el despido del empleado en cuestión, por el abandono de su lugar de trabajo y la desatención de los clientes, “que afectó los intereses de su empleador”.

(Fuente: SURTIDORES)