Si bien en otras partes del mundo la compañía de capitales anglo-holandeses disminuirá las inversiones y recortará 6.500 puestos de trabajo, los activos en la plaza local no se verán afectados. ¿A qué se debe esta decisión de la casa matriz?
El jueves, la firma Royal Dutch Shell anunció que despedirá 6.500 empleados este año, entre personal directo y subcontratistas, como consecuencia de los inconvenientes financieros que generó en algunos negocios petroleros la caída del precio barril de crudo.
Desde Shell Argentina, aclararon a surtidores.com.arque “esta reducción no afecta la operación en nuestro país”, trayendo tranquilidad a los operarios de la refinería de Dock Sud y de los pozos ubicados en la Patagonia.
A nivel global, las inversiones de Shell alcanzarán los 30.000 millones de dólares este año, lo que representa un diez por ciento menos de lo que se previó en abril y 7.000 menos que en 2014. ¿Cuál es el motivo? El mantenimiento del barril en torno a los 50 dólares, valor que no arroja rentabilidad en todos los casos.
Así lo explicó el propio Ben van Beurden, director general de la multinacional: “tenemos que demostrar capacidad de adaptación a un mundo en que los precios del petróleo seguirán siendo bajos durante un tiempo”.
Además de la reducción de empleos, Shell seguirá vendiendo activos por un valor total de 20.000 millones de dólares, continuando con el plan de reestructuración anunciado el año pasado.
En líneas generales, las empresas esperan a que el petróleo suba por encima de los 70 dólares antes de embarcarse en nuevos proyectos. En estas condiciones, no van a realizar operaciones de gran riesgo, tal situación es la que se observa en Vaca Muerta, tercer reservorio de hidrocarburos no convencionales en el mundo, que no logra captar capitales en relación al potencial existente en el subsuelo.
De hecho, este año ya hubo ajustes de personal en el yacimiento: en julio empresas del sector despidieron a 180 trabajadores, que se agregaron a los 250 operarios cesanteados a fines de mayo por las proveedoras de servicios petroleros Schlumberger, Waetherford y Halliburton.
En cuanto a las perspectivas de esta materia prima básica, hay visiones encontradas. Hay quienes aseguran que irá paulatinamente acercándose a los 90 dólares, otros, en cambio, sostiene que habrá energía barata para rato. En general las ideas varían en función de los análisis que realiza cada experto sobre los enfrentamientos entre países de Medio Oriente, la demanda de China y Europa, la entrada en producción de Shale, entre otras cuestiones.