Se trata de una iniciativa que busca agilizar la descarga de combustibles y prevenir los hechos delictivos. Fue pensada con el objetivo de reducir las colas e incrementar las ventas, en respuesta al gran crecimiento que vivió el parque de ciclomotores en los últimos años. Además, se reforzaron las normas de seguridad de despacho.
El boom de la venta de motos alteró el servicio en las bocas de expendio. Si bien la carga de nafta en estos vehículos demora menos tiempo que en un automóvil, lo cierto es que requiere de la presencia constante del playero, perjudicando la atención en otros surtidores donde por momentos se generan filas de gran extensión.
Ante esta tendencia del mercado, un local de marca Shell de la ciudad de Rosario, Santa Fe, ubicado en 27 de Febrero y Av. Presidente Perón, en la zona oeste de dicha localidad, implementó una Isla exclusiva para motos “con la finalidad de proponer un servicio diferenciado y más rápido a cada cliente”, indicaron desde la empresa propietaria, H. Regina.
Dicho espacio físico dedicado a este segmento de consumidores cuenta además con varias mejoras respecto a la seguridad de operación de la estación y el cuidado de los clientes, por caso, las motos deben ordenarse en 2 filas previo a ser abastecidas, minimizando el riesgo de exposición a ser golpeadas por la salida de un auto.
Asimismo, el operador incorporó 2 equipos fijos para sostener a los rodados que no dispongan del pie soporte, permitiendo que en esas circunstancias puedan suministrarse de combustible. El dispositivo, elaborado por Shell, está diseñado para cubrir un importante rango de tamaño de ruedas y es especialmente efectivo en motos de cilindrada baja y media (50/110/125cc), modelos en los que se ha detectado mayor cantidad de soportes defectuosos durante la etapa de análisis.
Reforzando el cumplimiento de la normativa, en la isla se instalaron carteles que alientan al “motoquero” a conducir con casco, chaleco reflectivo y luces encendidas. Con el mismo plan se colocó un exhibidor con productos exclusivos para motos.
Según cuenta Ismael Marcón, secretario general de la seccional Santa Fe del Sindicato de los Empleados de Estaciones de Servicio, “los clientes se encuentran muy satisfechos porque se llevan un mejor servicio, dedicación y experiencia al cargar combustible en la estación”.
En relación a esta propuesta Marcón señaló que “es una medida para atender a las motos que da tranquilidad a los automovilistas y lleva a hacer más importante el control de los robos”. Asegura que a partir de esta diferenciación será más fácil detectar la llegada de ladrones, ya que destaca, “habrá mayor presencia de gente en la zona de despacho”.