Advierten que las estaciones de servicio no están en condiciones de continuar con un esquema de congelamiento en el surtidor. Para analizar este y otros temas dirigentes de la Confederación que las representa se reunirán el martes en Capital Federal.
Luego de conocer la determinación de Guillermo Moreno de extender el tope a los precios que determinó en abril de este año a través de la Resolución 35, los expendedores comenzaron a tomar posición respecto los alcances de la medida.
Esta posibilidad que las bocas de expendio y petroleras prácticamente daban por descontada dadas las condiciones del mercado; la necesidad de inversiones que presenta la actividad y los magros márgenes de las estaciones; se presenta como un problema de difícil solución. ¿Qué se puede hacer en estos casos? Plantear a Moreno la situación no despierta expectativas ya que en oportunidades anteriores, sobre este y otros puntos, no tuvieron suerte por la vía del dialogo. En este contexto de falta de respuestas: ¿Se animarán los dirigentes a decretar un cese en la comercialización de combustibles?
“Creemos que sería sumamente injusto que se extienda el techo a los precios porque nosotros no somos los culpables de que en el país haya inflación”, manifestó Alejandro Martorell, vicepresidente primero de la Confederación de Entidades del Comercio de Hidrocarburos y Afines de la República Argentina (CECHA). “Sería muy preocupante que se prorrogue porque nos congelan el precio de venta minorista pero no el mayorista”, cuestiona. Explica que este trato diferencial en el interior de la cadena de comercialización termina absorbiendo los márgenes de las estaciones de servicio.
Por eso, desde CECHA adelantan que no se van a quedar con las manos cruzadas. “El martes tenemos la primera reunión de mesa ejecutiva de la nueva comisión directiva en la que vamos a estar analizando medidas para evitar el cierre de más comercios”, anticipó Martorell. Y agregó: “ante la injusticia hay que realizar reclamos”.
Además, el dirigente critica que un escenario de congelamiento en los surtidores afecta el curso de las inversiones en las destilerías y pozos petroleros, tan importantes en el actual contexto de mercado. “Esto propicia la desinversión en la actividad”, alerta.