Las comercializadoras de gas siguen insistiendo en el reclamo de los saldos de facturas por el gas natural proveniente de la cuenca neuquina durante los meses de junio a septiembre de 2011 emitidas en dólares a 4,33 en lugar del tipo de cambio fijo de 3,10. Advierten medidas legales
Las comercializadoras de gas reiniciaron el proceso de intimación contra las estaciones de GNC para que actualicen los saldos de facturas oportunamente emitidas en dólares a 4,33 en lugar del tipo de cambio fijo de 3,10 como establecía la documentación emitida por la Secretaría de Energía y confirmada por el MEGSA.
Según explican, el reclamo surge de lo convenido con la Cámara de Expendedores de Gas Natural Comprimido -CEGNC-, que acordó el saldo impago en una, dos y hasta en tres cuotas mensuales, iguales y consecutivas, con vencimiento la primer cuota el 30 de junio, la segunda el 16 de julio y la tercera el 15 agosto de 2012.
La controversia se generó cuando la energética estatal facturó la provisión de gas natural regasificado importado (GUI – Gas de Última Instancia), inyectado para suplir los faltantes en las bocas de expendio durante los meses de junio a septiembre de 2011, con el valor del dólar al cambio vigente al día anterior de pago de la factura correspondiente (4,33 $/U$S aprox.) en lugar del tipo de cambio fijo de 3,10 $/U$S establecido en la documentación emitida oportunamente por la Secretaría de Energía y confirmado por el MEGSA en la Circular Nº 180/2011.
La medida despertó gran incertidumbre entre los expendedores de este combustible por el perjuicio económico que les ocasionaba una determinación de esta naturaleza. Las diferentes entidades del sector se declararon en alerta ante esta situación y decidieron concurrir a las autoridades para exigir que se revea el dictamen.
Por consejo de las cámaras empresarias, la mayoría de los empresarios decidió pagar en función de lo que debería según el método habitual (con el recalculo correspondiente para evitar que le corten el suministro). En paralelo, remitieron una notificación fehaciente comunicando las razones de su decisión.
Las comercializadoras, lejos de aceptar la propuesta rechazaron la modalidad y volvieron a intimar a los estacioneros a regularizar el pago de la factura bajo apercibimiento de iniciar acciones legales.
Las razones de la decisión de la energética estatal encuentran su origen en la negativa de Repsol, cuando estaba al frente de YPF, de no inyectar más gas adicional que el comprometido durante el período mencionado, debiendo Enarsa hacerse cargo del excedente, quien lo obtenía como gas importado o regasificado.